Las emociones nos acompañan en nuestro día a día sin que podamos hacer nada para evitarlo. Forman parte de nuestra parte innata y de la respuesta biológica del organismo ante determinadas situaciones. No obstante, aunque hablamos mucho de ellas, no siempre tenemos claro para qué sirven. En este artículo queremos presentaros las funciones de las emociones básicas Saber para qué sirven, nos puede ayudar a identificarlas y gestionarlas de la manera más saludable posible, aumentando así nuestra inteligencia emocional.
MIEDO
El miedo es una emoción básica relacionada con nuestro instinto de supervivencia. Nos avisa de un peligro (real o imaginario) al que hemos de hacer frente de alguna manera por lo que activa nuestras respuestas de lucha o huida valorando qué podemos hacer. Esta misma duda sobre qué podemos hacer, puede hacer que nos quedemos paralizados y dudar de nuestras propias capacidades, habilidades o recursos, por lo que nos obliga a analizar la situación y a nosotros mismos.
IRA o RABIA
La rabia es una emoción que se expresa hacia fuera. Cuando estamos enfadados el cuerpo nos pide gritar, correr,… En definitiva movernos y sacar lo que llevamos dentro. No obstante, la rabia, igual que el miedo, activa nuestras respuestas de lucha. Cuando sentimos rabia es porque de alguna manera nos sentimos agredidos o atacados, como si alguien pisara nuestros derechos o nuestra identidad. En este sentido, a partir de la rabia, el cuerpo nos envía un mensaje para que nos defendamos de alguna manera.
TRISTEZA
La tristeza es otra emoción, como el miedo, que nos hace tener una mirada hacia nosotros mismos. Aparece ante las pérdidas y nos obliga a cuidarnos y mirarnos para adaptarnos a la nueva situación que estamos viviendo. Aunque suele asociarse con procesos de duelo, no hemos de olvidar que las pérdidas pueden ser de muchos tipos, la pérdida de calidad de vida, de salud, de habilidades, de amistades, de ilusiones, de tiempo, de esperanzas, de sueños,… cualquier cambio que implique dejar algo atrás puede generarnos este sentimiento de pérdida y, por lo tanto, puede implicarnos tristeza.
ALEGRÍA
La alegría es una emoción expansiva que os invita a compartir y relacionarnos con los demás. Se trata de una emoción que nos proporciona energía para intentar nuevos retos, cumplir sueños,… en definitiva, nos invita a experimentar el momento con un matiz de optimismo y confianza en nosotros mismos. Además nos facilita establecer buenas relaciones sociales.
Y ahora que sabes para que sirve cada emoción, ¿sabrías identificar el mensaje que te dan a ti en particular? Cuando las sientas no huyas de ellas, escúchalas para descubrir qué quieren decirte y cuál es el mensaje que te están proporcionando. Reconocerlas e identificarlas es el primer paso para poderlas gestionar.
Para más información no dudes en escribirnos a info@centrepip.com